En un prístino bosque de montaña en Andalucía, entre Júzcar, Faraján y Pujerra, naturaleza verde y cobre de Málaga +34 672 500 888
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Experiencia culinaria exquisita para todos los sentidos y todas las edades con las manos en la masa
en la finca maravillosa de la Serranía de Ronda que nos cuida y cuidamos.
Es un lugar increíble por sus vistas, su pureza y su belleza... el corazón del bosque.
Haremos bombones juntos y también otros dulces y postres de algarroba,
todo sin azúcar y dulce de forma natural
PRÓXIMAMENTE
DE MOMENTO PUEDES ENCONTRARNOS CON LOS BOMBOMES
EN LA PLACITA DE JÚZCAR CON LA MÚSICA EN VIVO DE PIANO
EN LOS FINES DE SEMANA DE OTOÑO DEL BOSQUE DE COBRE
ESTAMOS PREPARANDO TODO
PARA QUE PUEDAS ADQUIRIR ESTOS BOMBONES
TANTO ONLINE COMO EN TIENDAS FÍSICAS POR EL MUNDO
Todo empezó cuando Cristóbal, desde Málaga, le trajo a María, en Carranque, Toledo, unas trufitas conquistadoras que había preparado con toda su familia...
LA CONQUISTÓ
Y ella que no sabía cocinar casi nada mas le ENCANTABA comer y comer súper sano,
todo tal y como descubrió Weston A. Price que comían los indígenas con los dientes maravillosos,
y no encontraba casi en ninguna parte cosas hechas de forma tan sana Y que además estuvieran ricas,
soñaba con abrir algún día un restaurante de todo comida maravillosa que hiciera "otro", porque ella no sabía...
Y paralelamente Cristóbal se debió de pasar un año rezando para que ella hiciera algo comestible
que de verdad se pudiera comer, y entre los sueños de una y los rezos del otro
de las manitas de Marío salieron estos bocaditos exquisitos.
María y Cris
Ella prepara todo lo de los bombones y la web súper contenta, él la ayuda un montón con musiquita, risas y estar ahí para un roto y un descosío.
Y nuestras familias se están portando de olé y echando un cable en todo lo que saben.
¡ESTÁ SIENDO SÚPER BONITO Y DIVERTIDO!
Y esperamos que todo este amor y alegría
os llegue a vuestras casitas.
QUE EL MÁXIMO DE NIÑOS PUEDAN DISFRUTAR
DE DIENTES,HUESOS, CALMA
Y TODO SANÍSIMO Y BIEN HASTA LOS 100
DEJAR EL PLANETA MÁS LIMPITO Y BONITO
DE LO QUE NOS LO HEMOS ENCONTRADO
HACER TODO LO QUE HACEMOS CONTENTOS, TRANQUILOS,
BIEN HECHO, Y CUIDANDO LAS NECESIDADES DE TODOS
Hacemos todo lo posible por crear salud y belleza
usando el mínimo de recursos y al máximo biodegradables.
Buscamos que nuestros procesos, embalajes y transportes
hagan uso del mínimo plástico y combustible.
Esto es una forma de vida dentro y fuera de CAROB LATE,
algo que nos apasiona y es inseparable de nosotros.
Un problema en los dientes nos hizo descubrir
el trabajo fascinante del dentista WESTON A. PRICE,
que observó cómo los indígenas de Canadá
tenían muchas mejores dentaduras, sin caries y ordenadas,
que las personas blancas "más ricas"...
y decidió viajar a varias tribus intactas por el mundo
para comprender la sabiduría que guardaba
la alimentación y forma de vida indígena...
LO DESCUBRIÓ
La deliciosa algarroba que cuelga de los árboles en nuestros bellos bosques mediterráneos,
y en concreto aquí en el Valle del Genal, donde estamos,
es una legumbre con alto contenido en pectina,
lo cual la hace bactericida, antiviral, coagulante, anticancerígena
y un buen remedio para el colesterol.
Rica en vitaminas A, B1, B3 y D,
además en minerales como el Magnesio, Fósforo, Zinc, Potasio y Calcio,
es dulce mas tiene solo un 1% de grasa y es apta para diabéticos.
Antidiarreica y digestiva. Adelgazante y saciante.
No tiene gluten ni teobromina ni nada adictivo...
vamos... una joya.
EL LUJO PARA LA SALUD DE COMER DULCE...
MAS SIN AZÚCAR,
SOLO CON DULCIFICANTES NATURALES
¡Y ADEMÁS SÚPER NUTRITIVOS!
Es el doctor Weston A. Price, dentista canadiense de hace un siglo, quien nos fascinó con sus descubrimientos empíricos tras estudiar in situ las dentaduras y huesos de personas vivas que llevaban una dieta bastante distinta a la "normal actual". En concreto estudió a indígenas y gentes tradicionales de pueblos remotos que no habían entrado en contacto con el "hombre blanco" aún y, por lo tanto, con la dieta "civilizada"... mas que gozaban de dentaduras impecables hasta los 100 años... mientras que los "civilizados" no... ¿Cómo podía ser?... Uno de los ingredientes que estos pueblos jamás habían probado ni introducido en su dieta era, en concreto, el azúcar blanca.
Es por esto que usamos otros regalos dulces y completos que nos da la tierra, regalos sin refinar, provistos aún, pues, de todos sus minerales y todas sus vitaminas, enzimas y propiedades que, de una forma tan sencilla como es comiendo delicioso, nos pueden ayudar a mantenernos sanísimos... la comida es medicina, o desde luego puede serlo si así lo elegimos.
La panela mantiene todos los minerales aún, el dátil la fibra... y así un largo etcétera. Dulces que nutren.
Y al no pasar de los 45 grados de calor al elaborar nuestros productos: las enzimas que nos apoyan y aportan tanto quedan vivas y en todo su esplendor, intactas.
De modo que tan solo un pedacito de lo que preparamos es un... superalimento, no te quita ni fuerzas ni alegría ni cuando lo comes ni después... solo te da. Te da fuerzas, te da salud, te da calma, te da nutrientes para tu cerebro, tu cuerpo... y por el amor con el que está todo preparado nos atrevemos a decir que también a tu alma.
Comer dulces nos hace sentir bien, claro, ya que es un placer en sí y además muchas veces compartido, parte de algo social de celebración y precioso. Y nos sentimos muy honrados de ser parte de quienes te pueden ofrecer el lujo de poder hacerlo invirtiendo en tu salud y la de los tuyos, especialmente los más pequeños, en tu presente y futuro, el vuestro,
en el presente y el futuro de todos y del planeta también.
Estos bombones y turrones son un acto de amor.
Está siendo precioso prepararlos, regalarlos, comprender, cuidar... cuidarnos y cuidaros.
